Lo que siempre soñé.

Un grito desesperado que se disfraza de ansiedad.
Un llanto sin voz que me ahoga por las lágrimas.
Todas las canciones, todas, me hablan de vos.

Me dicen que te busque, que te cante,
Que te viva en secreto, que te viva en vida.
Yo insisto con no dejarte ir.

Me duele el alma, está mareada de necesitarte.
Mis ojos te extrañan.
Sos el mejor complemento para lo que nunca tuvo sostén,
para lo que nunca nadie vio ni entendió de mi.

Estoy destruyendo las flores de ese mundo que creamos,
llorando, rompiendo y gritando con dolor.
Ese mundo que tanto necesito, con el que puedo respirar.
Era mi eternidad.


Todo ese silencio que nos hacía mágicas
hoy me come por dentro, me hunde en la desesperación
de tenerte, de que logres con tus ojos parar el tiempo
y que con una sonrisa puedas devolverme toda esa locura que te mostré.

Tan tuya es mi locura que
me envolvió en pensamientos, en historias
que sueño en hacerlas realidad.

Es demasiado tarde para darme vuelta y caminar,
como si no dejara nada atrás, cuando en tus ojos
se quedó una parte de mi alma,
esa que perdí la primera vez que te escribí.

Me niego a pensar que no estás atrás de cada luna.

Soy lo que nunca mirarías,
soy lo que nunca desearías
y por eso se te hace fácil olvidarme,
vos sos, en este y en cualquier mundo donde hayan dos
lo que siempre soñé.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Otro corto cuento.

25 Junio 2024

HOLA